Uno de los acontecimientos que alegra mucho el corazón del hombre es la fiesta, (claro, siempre y cuando haya las condiciones internas para poder celebrarla y gozarla) o hacemos fiesta porque tenemos alegre el corazón.
Pues en Jamay, Jalisco, México (cuánta palabra no?) empezó la fiesta en honor del Corpus Christi. El inicio se hizo con la entrada oficial de los gremios (grupos de trabajadores en diferentes áreas) Cada gremio va acompañado de grupos y barrios de la parroquia, encabezados por un carro alegórico y un grupo musical.
Mientras nos preparábamos para partir y terminar acomodos en los carros alegóricos, los músicos hicieron de las suyas amenizando el momento, parecía competencia de bandas musicales eran 8 ó 9, por una oreja me sonaba la canción de “Qué chulos ojos” y por la otra “Mi gusto es”, eso era una locura, pero el corazón se sentía feliz y los pies, pos ni les digo, con ganas de agarrar pareja y empezar el baile.
Empezó la procesión y yo fui en el gremio de los restauranteros y profesores, gocé mucho y casi me sentía miss universo, saludando a todos los chiquillos que me veían y decían ahí va la madre y gritaban ¡¡¡¡Madre!!!! Y pos había que saludar y dirigirles una gran sonrisa, bueno y como nosotros íbamos casi adelante, al terminar la procesión me tocó ver el paso de todos los carros, al final iba el Santísimo en un carro muy bonito acompañado por el gremio de albañiles y pescadores y generosos como son los pobres, iban lanzando caramelos y gorras.
Luego siguió la charlada en grande y ahora, pos seguimos en fiesta. Todavía no me he dado el tiempo de ir a pasearme, de ir a los juegos, ya iré, no me los pierdo; eso sí, por las noches la música acompaña mi intención de echarme en los brazos de Morfeo, porque la plaza está a un ladito de mi casa y todas las noches hay juegos, música, algarabía y toca estar un rato, acostada, mirando la luna desde mi ventana y dejar que la música me arrulle hasta dormirme.
También he estado pensando en lo interesante que es observar las formas de manifestación de nuestras culturas, las formas como expresan su fe, sus relaciones, su visión del mundo y de la historia, su cotidianidad, sus broncas y sus preocupaciones.
Yo por lo pronto, estoy happy, happy y con ganas de bailar, pondré en mi mente ese deseo para que se cumpla.
Ay nos vemos y que siga la fiesta y que VIVA Jamay!!!!La foto de arriba, es una vista de la Laguna de Chapala aquí en Jamay, donde termina esta belleza
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