Para empezar, la vivencia de todo lo que significó la celebración de
Luego las posadas en la fundación CANICA, (Centro de Apoyo a Niños con Cáncer) donde yo estaba colaborando como voluntaria y que viví con mucho gozo acompañando a toda la gente linda que hace posible ese proyecto de apoyo a estos pequeños que viven con el cáncer y a sus familias.
Luego había que hacer silencio y oración para preparar el corazón al gran acontecimiento de celebrar la presencia del Hijo de Dios hecho hombre entre nosotros, de hecho, tuve tiempo para el silencio, porque me dio gripe y fiebre, así que la noche del 24, no pude ni participar en la celebración, me la pasé en casa bien abrigadita.
También vino, como jugando carreras con todo esto, la celebración del II Congreso de
fue un momento muy bello y enriquecedor, además, me encontré con hermanas que hace tiempo no veía y eso alegró mi corazón.
Luego me llamaron para pedirme un nuevo cambio – ando del tingo al tango – a
La Sierra Tarahumara forma una sola diócesis organizada en cuatro vicarías pastorales, con 122 religiosas, 12 religiosos, que no son curas y 39 sacerdotes, muchos de ellos religiosos, 163 laicos un buen número de ellos vienen de otros lugares del país para colaborar en la misión.
Aquí estamos Carmelitas del S.C., Adoratrices, Misioneras de María Dolorosa, Scalabrinianas, Misioneras de
Es una zona indígena, Tarahumara y Tepehuana, también hay mestizos o chabochis como los llaman los indígenas, pero la mayoría son indígenas. La zona es muy fría, de hecho, el camino de llegada a Baborigame me tocó con nevada, todo se veía precioso, blanco, fue un hermoso recibimiento, aunque pesadito, porque en bus hasta acá, se hacen como 27 horas, lo bueno es que no me las aventé de jalón, porque antes hicimos un intermedio en un poblado llamado Sisoguichi, para una reunión de Profectar (Proyecto de Fe Compartida de
Ya les iré compartiendo la experiencia y riqueza de esa reunión y del ánimo que me dio convivir con otros misioneros y misioneras que entregan su vida por aquí. Todo estos es un mundo nuevo para mí, me siento totalmente aprendiz y en mucho “reposo” después de la agitada vida de la ciudad, aquí, se trata de ir lento, despacio, mirando muy bien cada pisada, como dicen los Tarahumaras, para saber y conocer el camino como sus antepasados.
Esta es nuestra casa y si vienen, serán bienvenidos
Eso sí, hace muuucho frío, de hecho, el agua amanece congelada, todo helado, así que mejor ya me voy porque ya se está haciendo tarde y me agarra la helada en la calle.
Arroyo del camino a la comunidad Llano Grande
Indígena Tepehuana de la comunidad de Las fresas, su hijo acababa de morir en un accidente, por eso su rostro tan triste.
1 comentario:
Hola Luz, soy Celia, ojalá te acuerdes de mí, estuve de voluntaria en Bawinokachi hace dos años, el último año que estuvo Yuyú ahí en Bawino con su hermana también. Mientras buscaba información para unas actividades me encontré con tu portal de pura casualidad. Qué coincidencias que Dios nos pone en el camino, para que yo recuerde un poco de lo mucho que aprendí en ese año en la Sierra y también de lo que aprendí de gente bien luchona como tú. Enserio convivimos super poquito, pero yo no me olvido de nadie. Espero todo ande bien por ahí. Un abrazo fuerte y disfruta del friito. Saludos a todo el equipo de salud. Con todo mi cariño y mi oraciones desde Mérida. Celia Escalante
Publicar un comentario